Ruta del Nuevo Mirador, cuando la belleza está en la cima
SGplus les propone en esta edición un nuevo recorrido, breve pero intenso, que nos garantiza unas vistas espectaculares de todo el valle del Guadiaro
Por Soraya Fernández · FOTOS DORO Jr.
Se trata de un recorrido breve aunque complicado por lo intransitado del itinerario y la gran cantidad de maleza que encontraremos. Por eso resulta indispensable hacerla con calzado e indumentaria adecuados, así como un bastón para ayudarnos en los tramos más complejos.
La ruta del Nuevo Mirador, como la hemos denominado, parte del Cortijo Los Canos. Desde ese punto, tomamos la carretera que lleva a Pueblo Nuevo, flanqueada por espectaculares árboles. Se trata de un lugar muy transitado por los vecinos para caminar y hacer deporte gracias a las anchas aceras que flanquean la carretera.
A los pies de la colina, y casi escondido, nos encontramos con un búnker, una de las numerosas fortificaciones de este tipo que fueron construidas durante la década de los cuarenta del siglo pasado como parte de la red de defensa edificada en el Campo de Gibraltar.
Seguimos caminando en dirección a Pueblo Nuevo unos cien metros y continuamos por la senda de tierra entre las dos colinas. Se trata de un lugar complicado de transitar, por caminos de menos de medio metro situados entre una frondosa vegetación y que a veces se bifurcan, por lo que es fácil perderse. En la primera bifurcación cogemos el camino de la derecha.
A partir de ahí nos encontraremos algunos tramos complicados. Todo es subida y la maleza tiene que ser sorteada para poder continuar nuestra ruta, por lo que llevar ropa que nos cubra será fundamental para evitar arañarnos y causarnos heridas con algunas plantas.
Los restos de una muralla que encontramos al subir nos servirán como orientación para nuestro regreso. A partir de la misma hay algunas subidas complicadas para las que será necesario apoyarnos en el bastón y continuar ascendiendo hasta llegar a la cima de la colina.
Son apenas unos quince minutos en total pero merece la pena. Las vistas son realmente espectaculares. Desde allí podremos contemplar en 180 grados todo el valle: Guadiaro, San Enrique, Pueblo Nuevo, Sotogrande y el río Guadiaro.
Desde dicha cima también vemos el campanario de la parroquia de Pueblo Nuevo con el río Guadiaro y el puente detrás, una bella estampa. A lo lejos también divisamos la sierra de Casares y Gaucín. En la cima podemos aprovechar para reponer fuerzas, disfrutar de las vistas, tomar fotografías y respirar aire fresco. Cuando decidamos volver hay que hacerlo también con mucha precaución, ya que el descenso es aún más complicado por la pendiente y hay muchos caminitos que nos pueden confundir.
Por ello debemos tomar como referencia las viviendas que hay en la zona, junto a la colina que tenemos frente a nosotros para ir descendiendo poco a poco, con mucho cuidado, y llegar de nuevo al muro, lo que nos permitirá ya sin muchas complicaciones regresar a nuestro punto de partida.
