Nuevo Hogar Betania abandera la lucha contra la trata de seres humanos mediante una labor profesionalizada desde hace diez años. Begoña Arana explica los ejes del trabajo en la entidad
Por Reyes Seijas
En pleno siglo XXI existe una forma de esclavitud extendida por todo el mundo y por la que organismos nacionales e internacionales, gobiernos y entidades sin ánimo de lucro trabajan a diario para que esta lacra social no siga creciendo. Es uno de los delitos más comunes, que mueve mayor cantidad de dinero, después del tráfico de drogas y de armas. Las víctimas de este crimen ven violados todos sus derechos, dañando gravemente su libertad y dignidad, así como su integridad física y emocional.
Organizaciones delictivas operan en los distintos continentes obteniendo importantes beneficios basados en la utilización de las personas con diversos fines de explotación. Y cuyos objetivos suelen estar puestos especialmente en personas vulnerables.
Una de las entidades más activas en este sector y reconocidas a nivel nacional es Nuevo Hogar Betania. SGplus ha querido hablar con la directora de la entidad con sede en La Línea, Begoña Arana.
Son diez años los que llevan trabajando en la trata de seres humanos. Nuevo Hogar Betania es un recurso especializado avalado por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, en el que se trabaja tanto la explotación sexual como la laboral. El inicio fue enfocado especialmente a las mujeres potenciales víctimas de explotación sexual pero, como dice Begoña, “la realidades van cambiando” y decidieron ampliar el espectro para poder atender a mujeres que fueran doblemente explotadas. Y desde hace tres años empezaron a trabajar con menores víctimas de trata por explotación sexual y aún más recientemente con hombres.
La problemática no solo está presente en el plano internacional, “está aquí, nos invade, tenemos casos individuales infinitos como para asegurar que lo tenemos muy cerca”, aseveraba Begoña. Y la evolución en el número de casos a lo largo de los años, según contaba la directora, “es muy cambiante, ahora estamos en un boom de ingresos”.
A Betania llegan casos derivados de toda España, cuyo origen es aún más diverso. “Empezamos con mujeres especialmente de Nigeria, ahora tenemos de Europa del Este, Costa de Marfil, Guinea Conakry, Mali, Marruecos, Portugal, España… Hay de todo y ha ido cambiando con el paso del tiempo”, explicaba la directora. Sin embargo en el caso de los hombres son todos latinoamericanos.
Con todos ellos el objetivo es claro: ofrecerles protección, atención integral, seguridad, empoderamiento y una alternativa de vida fuera de las redes. En este sentido, Begoña explicaba: “dentro de nuestra actuación de protección empezamos a hacer formaciones y una labor de sensibilización y conciencia”. No hay que olvidar que “son procesos individuales vitales muy complicados de trabajar, porque hay muchas interferencias, como la cultura. Hay que hacer un trabajo muy arduo, consistente y constante. Es muy difícil, pero hay éxito. Es importante hacer una liberación de la red y a nivel emocional”.
Los avances de Nuevo Hogar Betania en este sector acaparan la atención de otros ámbitos que se fijan en la labor de la entidad y deciden unirse a su causa. Recientemente las fundaciones del FC Barcelona, Athletic de Bilbao y Real Bestis Balompie han firmado con la organización un acuerdo de colaboración para contribuir en esa labor de conciencia y sensibilización. Y la actriz española María Adánez ya es oficialmente embajadora del Área de la Mujer. “A la entidad nos sirve como altavoz debido a su posición con los focos de cerca, es un orgullo y un eslabón más que nos lleva a otro recorrido en el que yo creo que ya estamos”, afirmaba Begoña.
El mensaje final de la directora de Nuevo Hogar Betania apela a esa labor individual con la que todos podemos contribuir en pro de la sensibilización. “Lo que se puede hacer es no estigmatizar a estas mujeres, que se le den más oportunidades de escucha, de acercamiento y de mejora de vida”.