Sotogrande cuenta en la actualidad con el único restaurante 100% vegano de la zona, una experiencia muy recomendable para cualquier comensal.
Visitar ‘Pura Vita’ supone, con sólo probar los primeros bocados de cualquiera de sus platos, desterrar de una vez todos los prejuicios y falsos tópicos que recaen sobre la comida vegana, acerca de su presunta falta de variedad o de sabor. Todo lo contrario, la carta de ‘Pura Vita’ invita a nuestro paladar a todo un carrusel de texturas y sabores diferentes, acompañados de una enorme originalidad en la elaboración y presentación de cada plato.
Todo eso es posible gracias a la labor de Gabriela Giumba, tanto por su extraordinaria creatividad para crear nuevas delicias para sus clientes, como por su inventiva para encontrar cómo adaptar cualquier plato posible a los estrictos estándares de la comida vegana.
Gabriela es, desde hace más de dos años, tan 100% vegana como su restaurante, y fue precisamente esa transición personal la que le llevó a experimentar constantemente en la cocina, primero de forma privada y ahora desde su restaurante. “Si veo alguna receta en Youtube, en Pinterest o Instagram, voy pensando por la noche los cambios necesarios para adaptarlo a comida vegana. A la mañana siguiente, en cuanto llego al restaurante, lo preparo y siempre sale algo especial. Es algo continuo, hay veces que ni puedo dormir, sueño con la comida y cómo hacer para que guste a los clientes”.
“Toda comida es posible con ingredientes veganos”, afirma Gabriela, que ha conseguido también reinterpretar la comida tradicional que ella recuerda de pequeña. “A veces echas de menos los sabores que te recuerdan a tu infancia, por eso he buscado la forma de reproducirlos con ingredientes totalmente veganos”.
“Para ella empezó a ser una afición y ha terminado siendo su pasión y su vocación”, añade su marido Ion, que la acompaña en esta aventura empresarial.
‘Pura Vita’ abre de 9.00 a 21.00 horas, ofreciendo comida vegana desde el desayuno hasta la cena. “Por eso tenemos una carta muy amplia, con 35 platos y la actualizamos todo el tiempo, con tres o cuatro platos nuevos cada semana. Nuestros clientes más fieles siempre quieren probar algo nuevo”, señala Gabriela.
Para todos los gustos
El restaurante de Gabriela y Ion supone una gran novedad para los veganos de la zona, pero también ofrece a cualquier comensal la oportunidad para experimentar platos y sabores más comunes, pero en su alternativa vegana, convirtiendo a ‘Pura Vita’ en un restaurante para todos los gustos.
“Intentamos hacer nuestra carta algo diferente”, señala Gabriela. “Además de ensaladas y platos habituales de un menú vegano también ofrecemos para clientes que no están acostumbrados una alternativa estilo burguer, así quien no es vegano puede comer y disfrutar también, aunque esté comiendo un menú completamente de origen vegetal. Para los niños especialmente tenemos nuggets, una boloñesa vegana con soja, hamburguesas y bacon vegano que viene de Rumanía, lo que me alegra especialmente porque siempre necesito tener algo de mi país en mi cocina”.
Esa inventiva para transformar cualquier plato en comida vegana es otro de los atractivos de ‘Pura Vita’, ya que el resultado supone una sorpresa garantizada para cualquier visitante. “Me preguntan mucho el pil pil”, afirma Gabriela, “los clientes no se creen cómo puede tener la misma consistencia. También preguntan todo el tiempo por los postres, por cómo sustituimos ingredientes tradicionales no veganos como el huevo o la mantequilla y aún así conseguir el resultado que obtenemos en nuestros dulces y bizcochos”.
Pero sin duda, como confirma la propia Gabriela, la verdadera estrella de ‘Pura Vita’ es su salsa carbonara con crispy bacon y de sabor tradicional, pero 100% vegana. “”Es lo que más sorprende y nuestro plato más vendido porque tiene un sabor muy bueno. Siempre nos preguntan cómo la hacemos, pero es nuestro secreto en ‘Pura Vita’. Conseguir ese toque de sabor a yema de huevo que requiere la carbonara tradicional, pero sin utilizar huevo”.
Con vocación de futuro
‘Pura Vita’ acaba de cumplir seis meses de su llegada a Sotogrande, de los que Ion y Gabriela hacen un extraordinario balance. “Elegimos esta zona porque hay mucha gente que entiende lo que significa la comida vegana, y por eso buscamos una base de clientes que sepa valorar y apreciar la filosofía de nuestro restaurante”.
Con el tiempo, esta pareja de emprendedores pretende ampliar las posibilidades de la experiencia de ‘Pura Vita’ en la zona. “Nuestra intención es, en uno o dos años, tener un restaurante más amplio, estilo fun dining donde poder realizar celebraciones, cenas románticas… También queremos abrir un establecimiento más pequeño sólo de tapas veganas para que la gente pueda ir probando mucha variedad y mostrarles que pueden optar por un estilo de vida más saludable y seguir disfrutando de la comida”.