“El problema es que nadie nos enseñó nunca a ser felices”
Empresa: Guerra de egos es el último libro del coach y experto en liderazgo, que cuenta además con una prolífica actividad en redes. Ahondamos con él en cuestiones tan vitales como la felicidad
Para las personas que aún no te conozcan, ¿qué podrías contarles a nuestros lectores para que se hagan una idea? Soy un director de Recursos Humanos con 21 años de experiencia, apasionado por las personas, con un espíritu algo inquieto que me ha llevado a la publicación de 2 libros -un tercero en marcha-, a la creación de un podcast, a ser colaborador semanal en la cadena Cope con una sección personal o, entre otras cosas, a la elaboración de un blog en el que ayudo a personas a ser una mejor versión de sí mismas.
¿Qué te hizo dar el paso para ejercer como coach ejecutivo y empresarial? Un departamento de Recursos Humanos es un centro de peregrinaje de infelices, todo el que acude a él es porque le pasa algo. Yo veía que mi verdadera labor para ayudar a la empresa era realizar una especie de coaching innato y por eso decidí formarme en esta materia.
¿El coaching ejecutivo tiene mercado en el Campo de Gibraltar o es solo para las grandes ciudades? A día de hoy internet te permite hacer sesiones con cualquier lugar del mundo, pero es cierto que en la comarca cada día tiene más mercado. Las grandes ciudades nos llevan adelanto, pero muchos directivos de la zona me demandan sus servicios ya que no se trata de una moda, sino de una necesidad. Las universidades te proporcionan un título para ejercer, te saturan de teoría, pero no te enseñan las habilidades necesarias para tener éxito en el ámbito laboral. En pleno siglo XXI las universidades arrojan al mercado laboral analfabetos emocionales y esto es la causa de la infelicidad laboral.
Si empiezas a jugar al golf o a cualquier otro deporte, ¿Qué haces? Lógicamente contratas los servicios de un monitor que te enseñe a jugar. Pues cuando asumes un puesto de responsabilidad debería de ocurrir lo mismo, pero no ocurre. Tienes que aprender a liderar equipos si quieres conseguir resultados óptimos y duraderos.
Detrás de cada habilidad que un directivo necesita aprender, de cada frustración, de cada conflicto personal, hay una infelicidad. Lo verdaderamente bonito de mi trabajo es que ayudo a transformar vidas.
Has hablado de felicidad laboral. ¿Se puede ser feliz en el trabajo? ¡Buena pregunta! Es mi obsesión. Las estadísticas son claras, ocho de cada diez trabajadores no son felices en su trabajo. Todos no se han equivocado de profesión, todos no tienen un jefe tóxico, etc. Es causa de no tener claro el concepto de la felicidad y de no tener las habilidades que la posibilite. El problema es que nadie nos enseñó nunca a ser felices.
¿Qué es la felicidad? La felicidad es el objetivo vital de todo ser humano. Todo lo que hacemos en la vida lo hacemos para evitar sufrimiento o para ser más felices. Pero muchas personas confunden la felicidad con la alegría o con pasárselo bien. La felicidad es otra cosa, es un estado interior de bienestar y paz que te lo proporcionan cinco aspectos necesarios: la pasión por lo que hacemos cada día, la calidad de nuestras relaciones, la seguridad de nuestras finanzas, la fortaleza física y el orgullo de nuestra aportación a la comunidad.
Está la felicidad del ser y la del tener. Solo indagando en la primera, puedes llegar a la verdadera felicidad.
La calidad de tu vida depende de la calidad de tus relaciones, tu felicidad también. No saber relacionarnos de forma eficaz es nuestra verdadera fuente de infelicidad.