Por OLIMPIA TARDÁ, gerente del International Montessori School
psicóloga infantil, especialista en coaching familiar

Hace días saltó una polémica en redes a raíz de la opinión vertida por una conocida influencer sobre el tema de la lectura. Resulta que uno de sus seguidores, realizó un comentario sobre una de las estanterías que previamente esta chica había mostrado en uno de sus videos en los que enseñaba  la decoración de su hogar, este seguidor opinaba que dicha estantería sería más bonita si la llenara «de libros que hubieran sido leídos», la influencer estalló dejando clara su postura acerca de la lectura : » Creo que hay que empezar a superar que hay gente a la que no le gusta leer. Y encima no sois mejores porque os guste leer, afirmó. Ello desató un tremendo debate en redes e incluso ha ocupado horas en espacios de TV, artículos en prensa,, todo un boom mediático.

Más allá de entrar en la discusión de si leer te hace mejor persona o no, de lo que sí me gustaría hablar es de la importancia de la lectura como medio de conocimiento y de desarrollo cultural, y de cómo están cambiando los hábitos de lectura en nuestro país.

El año pasado por primera vez desde hace tiempo, el 65,5 % de la población leyó libros en su tiempo libre, lo que representa un incremento desde los últimos años en los que teníamos índices de lectura tremendamente bajos. De este tanto por ciento de lectores, los que más leen son los jóvenes de entre 14 y 24 años, y dentro de ellos leen más las mujeres que los hombres. Durante el pasado año se alcanzó un récord de 77 millones de libros vendidos y más de 1.200 millones de euros en facturación, un alza del 10 % respecto a años anteriores. Sin embargo, a pesar de las mejoras que ha habido, aún hay un tanto por ciento de la población que no lee nunca.

La lectura constituye una enorme herramienta de aprendizaje y transmisión cultural. A través de ella, tenemos acceso a los descubrimientos y reflexiones de diferentes épocas y contextos, lo que garantiza la continuidad del saber. Asimismo, la práctica lectora fomenta el pensamiento crítico, pues expone a la persona a múltiples visiones del mundo, obligándola a contrastar, evaluar y formular sus propios juicios. Favorece el vocabulario y la expresión tanto oral como escrita, y también estimula la creatividad y la capacidad de innovación. Leer nos da conocimiento base de la cultura y la educación.

Tal como dice el escritor Arturo Pérez Reverte:” Hoy todo está a golpe de click,  en tu móvil, la historia, el conocimiento, no lo uses solo para hacer scroll o selfies ,si estudias lo que hay ahí puedes defenderte. Leed, defendeos. Un libro es un arma defensiva. Una biblioteca es una trinchera. Utilizadla antes de que los malos vengan y os corten el cuello como ovejas indefensas”.

Es la educación lo que nos da lucidez y criterio para desarrollar la  capacidad de elegir, en definitiva nos convierte en ciudadanos libres.